Esta cocina es el sueño de todo apasionado de la cocina. La isla central ordena el espacio al unísono que posibilita las circulaciones, e integra una pequeña región de barra para comidas veloces. El mobiliario, con molduras, tiradores de concha y ciertos módulos de reja, crea un grupo clásico y con gusto campestre. Es así como definieron el look de esta cocina el equipo de Deulonder, causantes del proyecto. Con el mobiliario totalmente en blanco y una enorme isla central que articula el espacio, se buscó el contraste con el suelo, un mosaico tricolor de aire retro, muy en la línea de la cocina.
Otra combinación con la que no falla una cocina blanca es con el negro. Para sumar mucho más distinción y impulsar ese punto british que la caracteriza, se ha instalado también un papel pintado con un estampado clásico. Ya estamos concluyendo este articulo sobre la cocina sin tiradores pero no tenemos ganas dejar de comentar los aspectos estéticos que puedes conseguir al instalar puertas de cocina sin tiradores. Con región de fuegos, aguas, una amplia y extensa barra para hasta cuatro comensales y espacio de almacenamiento. Esta isla es el corazón de esta gran cocina, que se ha completado con un frente de almacenamiento y una gran encimera de trabajo plus. Blanco y negro son un dúo que funciona a las mil maravillas.
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En gran parte merced al fregadero tipo granja y a la encimera gris antracita que sube por la pared, resguardándola, en forma de antepecho. Los muebles con molduras también aportan ese gusto tradicional. Y, gracias a los enormes ventanales, se ha prescindido de prácticamente todos los armarios altos. Para fanáticos de lo sencillo, esta cocina blanca es ideal.
Y en parte hay que al original módulo abierto de madera en forma de balda, que además da la nota cálida a este espacio proyectado con moblaje en blanco. El blanco en la cocina es apuesta segura. No solo no pasa de moda, sino que transmite higiene y aligera visualmente el peso de los armarios. Si buscas mucho más luminosidad en la cocina, un buen primer paso es escoger el moblaje en color blanco, pero si, además de esto, lo escoges brillo, el éxito está garantizado.
Una Cocina Clásico Que Cede El Protagonismo Al Espacio
Con un diseño de líneas puristas, sin artificios y con tiradores tipo uñero, está planeada en U. Con bandejas y tablas de madera, así como con complementos de fibra, como las cestas de la estantería que, además de esto, asisten a sostener el orden. Nos encantan los tiradores de madera a juego con la encimera de esta blanca cocina de estilo moderno. Otro de los elementos que más llama la atención es el pasaplatos que se abre hacia el salón, continuidad de las paredes acristaladas con barrotillo blanco. Esta cocina es pequeña pero con personalidad.
Y a fin de que no resulte tan fría, se ha introducido la madera en las sillas y la composición de la mesa. Con un fregadero doble, un horno de vapor y una placa dominó que combina distintas sistemas de cocción, esta cocina es perfecta para realizar las delicias de un cocinitas. En blanco y con los frentes llanos resulta, además, muy atemporal.
Una Mega Cocina Blanca Y Muy Campestre
Pese a las dimensiones de la cocina, no se ha descuidado la zona de comedor, diseñando un espacio para poder comer en familia y reunirse cerca de la mesa. Al fin y al cabo, una cocina servible y estética que cumple con las necesidades de esta familia moderna. Explicado de otra forma, ha vuelto de nuevo a la escena decorativa con mucha fuerza.
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Las ventajas que tenemos la posibilidad de enumerar son, en su mayor parte, de carácter estético. Al no colocar tiradores lo que logramos es tener una cocina de estilo nórdico o minimalista. Son estilos ornamentales sobrios, sin ningún ornamento.